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Voy cerrando el año - ¡ya era hora! - por campos blancos, casi inmaculados. Son lugares del pasado que invierno a invierno se visten de gala para que los foráneos, esos que sólo nos desplazamos para comer y beber, creamos en la Navidad. En las calles y plazas que ocupaban mi visión hasta ayer había nieve, mucha nieve, para disfrute de los pequeños y de los que no lo son tanto. Pero también hay espacio para desear a los que lean esto un próspero año nuevo.
Y un deseo para todos, el del borracho cuando el camarero le pregunta: ¿Qué quiere…? Y él, quizás en su momento más cuerdo, le contesta: Yo sólo quiero que se acabe la guerra en el mundo y que la gente sea feliz.
Pues eso…
5 comentarios:
Gracias. Yo no se muy bien lo que quiero, así que me sirve casi cualquier deseo. Pero puestos a pedir..
¿Te importa que guarde la primera foto del artículo?. La he titulado "Pueblo Alelo", que me parece un nombre apropiado y sugerente.
El caso es que me recuerda a varias pinturas, consecutivas en sus estilos; una romántica, capaz de agobiar el ánimo, y dos post-impresionistas, una de añoranza y otra de tristeza.
Ahora que lo pienso.. Quizá hasta he comentado el artículo.
Por supuesto que puedes guardar la foto, Turu. No es exactamente "Pueblo alelo" porque allí están las raíces de mis churumbeles por parte materna. El padre es de otros campos, más yermos quizás, con más farolas seguro. Es mi pueblo, pero sólo de adopción.
Un abrazo fuerte y feliz año nuevo
Me encantan las fotografías.
Hace siglos que no veo la nieve.
Un beso, cariño.
Feliz año nuevo.
Feliz año, ¡salao!
Feliz año doctor, feliz año.
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