¡Qué curioso!




Doce explicaciones tiene que dar el diccionario de la R.A.E para definir la palabra político. De ellas, la que más me gusta es la que menos refleja al individuo que desempeña ese papel en la actualidad. Dice a secas: Cortés, urbano. Busco términos que puedan estar relacionados, de alguna u otra forma, con ella y me sorprendo otra vez. Plebiscito necesita tan sólo tres definiciones, urna requiere cinco, referéndum se basta con dos, Senado se entiende con cinco, Congreso con seis y votación con dos. ¿Entonces? ¿Tan difícil es averiguar el verdadero significado de “político”? ¿Hay alguna definición más difícil? Sí. Busco la palabra partido. Necesita treinta y cuatro justificaciones de la Academia. ¡Así no se puede arreglar un país!

Para que se hagan ustedes una pequeña idea: el amor, quizás lo más delicado, embarazoso y agotador para que sea explicado con palabras, necesita tan sólo, y digo tan sólo, catorce interpretaciones. Y aún así, algunas no son verdad.

1 comentarios:

Camy dijo...

---pues eso..

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